miércoles, 16 de mayo de 2007

Rush *Snakes and Arrows* (2007)


He de confesar que *Snakes and Arrows* me generaba una gran duda, siendo fan incondicional de la banda tenía que conseguir el disco por cualquier manera pero reconozco que a execpción del *Counterparts* (1993) sus últimos discos solo me habían parecido *correctos* pero nada que realmente me hubiera entusiasmado.

Pero desde el primer track el disco comienza bien, con una potente mezcla de guitarra acústica y eléctrica que suena a algo del Hemispheres (1979), las letras estan llenas de energía, y la siempre omnipresente batería es contundente.

Este disco tiene muchos matices y estados de ánimo.... el comienzo de *Armor & Sword* y *Spindrift* me recuerdan extrañamente sonidos de los 80´s con bajo y guitarras a la Killing Joke o al primer Cocteau Twins, que después se van desenvolviendo a terrenos más conocidos y seguros pero que vuelven a cerrar con esas guitarras con texturas darkies.
Las instrumentales *Main Monkey Business* y *Malignant Narcissism* nos traen ligeros ecos de glorias pasadas del 2112 (1976) o el Moving Pictures (1981). Rolas como *The Way the Wind Blows* presentan a un Alex Lifeson desconocido, con sonidos bluseros y pesados tipo Cream.

*Faithless* y *We Hold On* son más personales, propias de un Neil Peart que se ha sobrepuesto a una serie de tragedias personales; un Neil Peart que volvió a tomar clases de batería hace menos de 10 años (aún cuando era ya un baterista consumado, considerado siempre entre los mejores) para empezar de nuevo, para reinventarse y no estancarse.

*Snakes and Arrows* nos regresa a un Rush de sonido complejo y fresco, sin ser pretensioso por que después de todo no renuncian al sonido popero de sus últimos años.
Lifeson no duda en usar guitarras acústicas y eléctricas de 6 y 12 cuerdas, mandolinas etc.como en años no lo hacía, las capas de las cuerdas proporcionan un coherente sostén a la voz y al bajo de Geddy Lee (los creditos no incluyen sintetizadores!) y a la siempre fantástica batería de Neil Peart.

Pocas bandas megaconocidas con más de 30 años en el rockanroll y con integrantes de más de 50 años tienen la dedicación de estos músicos (quienes los hayan visto en vivo habrán comprobado su profesionalismo y su energía) y este último disco esta lleno de esa dedicación, está lleno de pasión y de fe.


.....y si, si valió la pena la espera.


(Claro, tomen los comentarios con cautela, después de todo desde un principio me anuncié como Fanático de estas bandas jaja).

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